La maldición de El Sargal continúa (25-22)

Primera y amarga derrota del Ángel Ximénez – AVIA en liga. Tras un trabajado partido en el que la máxima igualdad era la clara protagonista, el equipo de Puente Genil acabó sucumbiendo en El Sargal, que continuará siendo asignatura pendiente para los pontaneses.

El reloj se puso en marcha y el conjunto de Quino Soler salió convencido de sí mismo, dispuesto a ofrecer su mejor versión lejos de casa y con ganas de plantar cara a un Liberbank Ciudad Encantada que buscaba, al igual que su rival, comenzar de la mejor manera su andadura en esta temporada 2017-18 de la Liga Loterías Asobal. Con un marcador que iba a la par, el tiempo transcurría sin superioridad de ningún equipo sobre otro, manteniendo un ritmo que solo llegó a romperse sobre el minuto 20, cuando el equipo pontanés logró ponerse por delante con una renta de dos (8-10). Sin embargo, el buen trabajo de Jorge Oliva en la portería no fue suficiente para frenar al que fuera su equipo años antes, que volvió a alcanzar a su contrincante para continuar con ese mano a mano hasta el final de la primera parte. Con un 11-11 en el electrónico, los dos equipos se fueron a los vestuarios conscientes de lo difíciles que serían los siguientes treinta minutos, donde cualquier error podría tirar por la borda todo el esfuerzo puesto hasta ahora sobre la pista.

La contienda se reanudó con la dinámica de la primera mitad, un constante pulso entre conquenses y pontanos donde no habría vencedores ni vencidos. Cuando el empate parecía ser el resultado con más posibilidades de materializarse, el Ciudad Encantada de Lidio Jiménez encadenó una serie de acciones en los últimos minutos que le darían el privilegio de ponerse a la cabeza, oportunidad que no dudó en aprovechar para ponerse hasta con cinco goles arriba (21-16 min. 53). Con los números a favor para los locales, el Ángel Ximénez – AVIA peleó todo lo posible para volver a atrapar a su adversario, pero el tiempo se agotaba y ya poco había que hacer. Muy a su pesar, el pitido final llegó con un 25-22 que dejaba un gusto amargo en el cuadro visitante, donde el trabajo y el esfuerzo volvía a quedarse sin premio en un fortín llamado El Sargal.